Para ir a La Laurel no se necesitan excusas, puesto a darlas te proponemos una a la que no podrás resistirte.
Se trata de las visitas narradas que el Ayuntamiento de Logroño organiza todos los fines de semana de Julio a Septiembre en la capital. El objetivo no es otro que promocionar el patrimonio y sus atractivos turísticos.
Dentro del recorrido, se han incluido nuevos puntos como la Puerta del Revellín, Baluarte del Revellín, Calle Barriocepo, Iglesia de Santiago, Plaza de la Oca, Calle Sagasta, Portales, Plaza del Mercado, Calle Mercaderes, Espacio Lagares y Calado de San Gregorio.
Lo curioso de esta propuesta es que los visitantes irán acompañados por narradores vestidos con atuendos de épocas pasadas que te trasladaran de forma rigurosa a la historia antigua de la ciudad. Como no podía ser menos, la visita incluye además una degustación de vino y queso.
Y aquí entramos nosotros, aquí entra ‘la otra visita’, la obligada. Si te quedas con ganas de más, no tienes más que seguir homenajeando a tu estómago con unos buenos pinchos y vinos en cualquiera de los bares que forman parte de La Laurel. Porque después de un plan cultural, toca pasar un buen rato en la calle logroñesa más famosa.
Ya sabes que eres bienvenido cualquier día, pero si te quieres aprovechar de este plan que aúna cultura y gastronomía, apúntate a una de estas visitas cualquier viernes (a las 20.00 horas) o sábado (a las 12.00 horas y a las 20.00 horas) en la Oficina de Turismo.
